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308555id1i_TheJudge_FinalRated_27x40_1Sheet.inddClint Eastwood sigue comprobándose como uno de los directores más transformables en Hollywood. Tan sólo el verano pasado, tuvimos la oportunidad de ver su musical Jersey Boys (el cual por cierto, no corrió con buena suerte en la taquilla internacional), una versión fílmica basada en un reconocido montaje teatral que apeló por explorar el género de la manera más tradicional generando poco impacto en el público.

Ahora Eastwood nos presenta otro proyecto completamente contrario a lo que le veníamos percibiendo en los últimos años, se trata de El Francotirador (American Sniper), producción que de forma opuesta a su anterior empresa, se ha convertido en uno de los más sonados éxitos comerciales del octagenario realizador. ¡Imagínense una figura de la talla de Eastwood en incesante reinvención!

Ahora se trata de la exploración de la virilidad de un diestro militar francotirador (magníficamente representado por Bradley Cooper) exhibido en una encrucijada moral: ¿hasta dónde puede llegar la lealtad de un soldado americano?

La cinta está basada en los recuentos del propio Chris Kyle, recluta competente en realizar complicadas encomiendas que finalizaban con la muerte de un objetivo. Finalmente «¿Has asesinado a alguien?» pregunta Taya (Sienna Miller) por teléfono, la indiscreta esposa quien aguarda a su marido cuando este se encuentra en medio de la zona de combate. El cuestionamiento esboza el conflicto ético que se desarrollará en el transcurso de la trama. Un capacitado servidor de la nación implicado en una serie de misiones de dudosa integridad.

Comprendemos perfectamente que el realizador en cuestión es un apto director que sabe enlazar una serie de secuencias creando tensión e interés en el público, pero nos da la impresión que la verdadera fascinación de Eastwood en esta cinta radica en la de discernir en una mente tan compleja como la de Kyle.

Basada en las memorias del mismo francotirador, el director recrea fielmente las anécdotas de la juventud del vaquero quien tras una serie de adversidades decide enlistarse en la Naval más con el propósito de descubrir su propio destino que con el de trabajar para su país, sin embargo los acontecimientos sucedidos el 9/11 modifican la óptica del asunto convirtiendo a Kyle en el más experimentado guerrillero con la cualidad de ser un preciso y cabal asesino a sueldo.

Curiosamente, El Francotirador se asemeja más a un western (Los Imperdonables como inmediata referencia, dirigida por el mismo Eastwood) que a una película cargada con un discurso antibélico. Finalmente, Chris confronta una pugna de carácter ético, en ningún momento se analiza (mucho menos enjuicia) la política exterior de los Estados Unidos en ese preciso momento. Es la disputa en la personalidad de Kyle ante el compromiso patriota, la verdadera columna vertebral de esta película. Eastwood no pretende más.

Por su parte, Cooper realiza una interpretación compleja del temperamento del protagonista mostrando sus titubeos y decisiones. Deducimos perfectamente el por qué del impacto de este relato dentro del público norteamericano pues El Francotirador resulta una especie de desafío ante el nacionalismo frenético surgido después de la caída de las Torres Gemelas.

American Sniper tampoco es una cinta perfecta, mucho menos el concluyente examen del civismo americano propagado en una era de paranoia, sin embargo sí muestra a un inteligente director en un momento creativo impulsado por su propia curiosidad, un realizador quien ha encontrado en su etapa senil, una fase de hallazgo y prueba digna de reconocimiento.

En Cartelera: Viernes 20 Febrero 2015: Cinépolis, Cinemex.

Por El Perro Andaluz / @CinemaMovil_mx