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result-5Bajo la perversa conjetura de que las partes del cuerpo de un albino poseen poderes curadores, se ha acentuado una brutal persecución contra esta raza en particular en Tanzania, acosamiento que ha costado setenta y cinco asesinatos (registrados) desde el 2000, derivando en un conflicto social del cual se habla muy poco.

Es así como se presenta Sombra Blanca,  película dirigida por Noaz Deshe, cineasta israelí establecido en Berlín quien retrata a través de las desventuras del adolescente Alias (Hamisi Basili) la discriminación que padecen los albinos en este territorio africano.

El protagonista padece en un trágico prólogo cuando su padre es víctima de cazadores que proveen a los brujos de las partes del cuerpo de los cadáveres de albinos y estos después los subastan argumentado una serie de propiedades curativas en estos trozos de carne.

Ante los brutales acontecimientos, la madre de Alias decide enviarlo a la ciudad deseando un mejor porvenir para su hijo. Sin embargo, Alias continuará enfrentando marginación y segregación: «Piel de cerdo» le llaman los trabajadores de las calles mientras el adolescente se gana la vida vendiendo películas piratas en las transitadas calles de la localidad. Pareciera que Alias no tiene un «lugar en el mundo».

En cuanto a la fotografía y el montaje, Deshe realiza una puesta en escena un tanto extraña, parte descarnado realismo (las escenas violentas son por demás francas) y parte la misma imaginación lírica de Alias quien constantemente fantasea con las nubes de un cielo azul, como si fuese una especie de sueño que termina en pesadilla.

De igual forma, la oscuridad de la noche está plagada de un simbolismo amenazante para Alias, quien tienen que transitar por la negritud con la finalidad de reunirse con los suyos.

La honestidad y la brutalidad con la que el realizador exhibe la cacería y el acoso de la raza hace de Sombra Blanca una experiencia un tanto difícil de sobrellevar, sin embargo, hay una sensación de urgencia en el discurso de Deshe que atrapa al espectador desde el primer cuadro hasta el último.

El cineasta, inteligentemente, mezcló la bestialidad con una dosis de romanticismo, por ejemplo esa historia de amor entre Alias y la hija de su jefe la cual es imposibilitada por el color y el pigmento de la piel del protagonista: «Si fuera negro, iría a visitar a tu padre» dice Alias en una ficticia llamada telefónica que hace el joven.

Si bien la historia padece de una extensa duración innecesaria y de una estructura por demás ambiciosa, White Shadow termina por ser una imprescindible cinta por su disertación, la cual de forma lamentable puede traducirse a otras culturas y sociedades. Este tipo de películas provocan una reflexión en el espectador, consideraciones que nos llevan a meditar más de lo común cuando escuchamos frases como ese mandato tan torpe que reza: «Regrésate con los tuyos».

En Cartelera: Viernes 19 Junio 2015: Cinemex

Por El Perro Andaluz / @CinemaMovil_mx