Todo indica que la joven Chloë Grace Moretz se está convirtiendo en un nombre recurrente en cuanto a los remakes de horror se refiere. Habiendo protagonizado en 2010 la versión estadounidense de Déjame Entrar (Tomas Alfredson), así como una reinvención del clásico de Stephen King Carrie (Kimberly Peirce) en 2013, la actriz que saltó a la fama en el poco convencional rol de Hit-Girl en Kick Ass (Matthew Vaughn, 2010) va por su tercer rol en este tenor.
Siendo un proyecto que con los años llegó al director Luca Guadagnino (Yo Soy el Amor, 2009), después de haber pasado por las manos de posibles directores como David Gordon Green (Pineapple Express, 2008), la nueva versión del clásico Suspiria (Dario Argento, 1977) parece al fin haber encontrado la luz verde que por tanto tiempo esperó.
A Grace Moretz se le unen Dakota Johnson (50 Sombras de Grey) y la consentida de Guadagnino, Tilda Swinton, con quien ya ha trabajado antes en títulos como la mencionada Yo Soy el Amor y más recientemente A Bigger Splash, que aunque no ha sido estrenada en nuestro país, fue una de las películas más comentadas por la crítica en tiempos recientes.
Financiada y distribuida por Amazon Studios, esta re invención del clásico del giallo italiano se suma a títulos como El Demonio Neón (Nicolas Winding Refn, 2016) y The Handmaiden (Chan-wook Park, 2016), demostrando una sólida apuesta de Amazon por el cine de género y realizadores arriesgados en su nueva etapa como casa productora y distribuidora a nivel internacional.
