El año pasado fue récord para el cine nacional. Se produjeron 130 cintas en México, la mayor cantidad desde 1959, y de cierta manera el país está en la mira de la industria a nivel mundial por el triunfo de mexicanos en certámenes como los premios Oscar y el festival de Cannes, entre otros.
Sin embargo, el medio aún tiene gran dependencia de los programas de financiamiento públicos, ya que sin éstos “México volvería a la época donde se hacían cinco películas al año”, coincidieron los cineastas Michel Franco, Alonso Ruizpalacios y Rodrigo Reyes.
En la mesa de debate “La industria de los medios y el entretenimiento en América Latina”, organizada por Tribeca Film Institute y Bloomberg, los directores dijeron que si bien hay gran talento, visión y pasión en los realizadores mexicanos, la falta de audiencia del cine nacional hace que el financiamiento de nuevos proyectos dependa prácticamente en su totalidad del sector gubernamental.
“El cine mexicano tiene una gran diversidad; en Güeros, por ejemplo, vemos a un grupo de chicos divirtiéndose por el Distrito Federal, y en Después de Lucía un material más íntimo sobre el bullying, y está genial. Sin embargo, cuando vas al cine ves a The Avengers anunciándose diez veces, a tres cintas de algún lugar más, y quizá sólo una película mexicana”, advirtió Michel Franco, ganador del premio a Mejor Guión en el Festival de Cannes de este año.
En este sentido, para Alonso Ruizpalacios, ganador del premio a Mejor Ópera Prima en el 64 Festival Internacional de Cine de Berlín, si bien las condiciones de presupuesto para su nuevo filme han sido mejores dado su reconocimiento por Güeros, aún existen obstáculos de financiamiento.
“Actualmente tengo un camino andado que ha ayudado a levantar mi nuevo proyecto; sin embargo, nunca puedes darlo por hecho, siempre hay que seguir aplicando para las becas, los festivales, sigue siendo laborioso y difícil. Ahorita tenemos casi todo el presupuesto levantado para la película, pero aún falta una parte”, añadió.
Sin embargo, lamenta, “el cine que hacemos Michel y yo, no es el que va a subsistir de los grandes negocios privados, necesitas incentivos estatales que tienen que ver con la existencia y permanencia de la cultura; el cine no sólo es negocio, también es cultura, a lo largo de la historia del cine siempre necesitado y necesitará de inversión estatal.»
Para contrarrestar este efecto la clave está en atraer a más audiencia, destacó por su parte Rodrigo Reyes, director del documental Purgatorio: Viaje al Corazón de la Frontera, por lo que los festivales han sido un canal que ha permitido a los nuevos cineastas darse a conocer.
“La fortaleza de la industria son los directores que tienen talento y algo que decir; sin embargo, el círculo no se completa porque la audiencia pertenece a alguien más. Podemos y queremos reconquistar al público; México tiene una de las mayores audiencias de cine a nivel mundial, así que hacemos lo que está en nuestras manos para traerlos de regreso al cine nacional”, subrayó Reyes.
Asimismo, plataformas de streaming online como FilminLatino han permitido a los directores llegar a un mayor público, ya que si bien Internet ofrece un mayor acceso a su obra, en otras plataformas de películas en línea es muy raro encontrar cintas independientes de directores emergentes.
“Solemos decir que si encuentras tu película en el mercado negro ya la hiciste; yo no he encontrado la mía, desearía que sí pero no (risas)”, dijo Ruizpalacios al respecto.