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cinema movil loveLove, cuarto largometraje de Gaspar Noé, presenta una relación que va de lo hermoso al sufrimiento debido a los errores cometidos por una joven pareja que cae ante las tentaciones, dejándose llevar por sus deseos sin medir las futuras consecuencias.

La película, que se estrenó en México el pasado viernes, ha generado todo tipo de comentarios, sobre todo por sus escenas de sexo explícito y por el uso del 3D como complemento de su historia. En Cinema Móvil tuvimos la oportunidad de platicar brevemente con el mismísimo director argentino Gaspar Noé al respecto.

Cinema Móvil: ¿Por qué decidiste retratar el amor de una forma tan tortuosa y con tantas escenas de sexo explícito?

Gaspar Noé: “Cuando uno hace películas no las hace pensando en la gente que se escandaliza al verlas, porque siempre va a haber alguno. Uno las hace pensando en sus amigos y en el grupo social al cual pertenece.

«Por las películas que me gustaron en el pasado, yo sabía qué tipo de representación del acto de la pasión amorosa quería hacer y sobre todo me parecía que faltaban películas en las que la pasión amorosa fuera mostrada tal como mis amigos y yo la conocimos. Esas primeras historias tortuosas de amor en las cuales uno está medio perdido, sobre todo si de por medio hay fiestas, alcohol y drogas, y estás en una ciudad como París o Nueva York, esas ciudades grandes en las que hay muchas tentaciones.

«El chico y la chica no quieren tener una relación tortuosa, pero el contexto de la historia es el que los lleva a tener una historia de amor complicada. Muchas parejas creen que cuanto más prueben juntos más se van a acercar, que cuanto mayor sea la complicidad mayor será la pasión también, pero resulta que hay cierto tipo de complicidad en la que se juega con peligros mayores.

«Cuando te metes a una relación pasional, el otro es tu aliado pero quieres poseer a tu aliado y que el otro te posea, pero menos de lo que tú lo posees. Debido al contexto social en el que se encuentra, esta pareja termina engañándose pero lo maneja mal y cuando entran los celos todo se empieza a descomponer poco a poco. Las parejas funcionan mientras los celos no se metan de por medio.”

Ya tenías pensada la historia de Love desde hace unos 10 años, ¿por qué tardaste tanto en hacer la película?

“En realidad cuando hice Irreversible yo ya quería hacer Enter the Void, pero me costaba trabajo conseguir el financiamiento para hacerla y comencé a escribir Love, pensando hacerla en francés, en 2D y con actores desconocidos.

Irreversible acabó siendo un éxito comercial y me permitió hacer Enter the Void, que era una película casi imposible de hacer, y una vez que me la saqué de encima pensé que quería volver a este proyecto inicial que tenía y que representaba una pasión amorosa tal y como la conocimos mis amigos y yo.

No había referentes de una película como Love y me costaba conseguir el financiamiento, pero lo que me ayudó fue que La Vie d’Adèle ganó la Palma de Oro en Cannes y tuvo mucho éxito. Finalmente se dio y entre tanto también me dieron un subsidio del estado para hacer la película en 3D, yo no pensaba hacerla en 3D y finalmente pude hacerla como yo quería.”

¿Cuál es la función del 3D en Love, es sólo un complemento de la historia o funciona como una herramienta narrativa?

“Es más como un complemento emocional, la película parece mucho más íntima si la ves en una pantalla grande en 3D y aún más si la ves sin subtítulos. La pantalla pasa a ser como un teatro de marionetas gigantes y tienes un sentimiento superior de realidad a la vez de un sentimiento extraño que se crea y que es muy hipnótico. Pese a eso, pueden ver la película en 2D, sólo que la sensación es diferente.”