Nadie puede negar que Robert De Niro es uno de los grandes actores de la historia, gracias a su Vito Corleone, Travis Bickle, Jake La Motta, Jimmy “The Gentl” y Max Cady. Sin embargo, a principios de este siglo entró en una clara zona de confort, donde era evidente que sus elecciones nada tenían que ver con el estatus de su carrera y talento; fue así que su filmografía de los últimos 16 años está llena de proyectos mediocres. Debido al estreno de otra «joyita» con De Niro, Mi Abuelo Es Un Peligro (Dirty Grandpa), recordamos cinco de sus peores películas.
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5) The Big Wedding (Justin Zackham, 2013)
Con motivo de la boda de su hijo Alejandro (Ben Barnes), Ellie Griffin (Diane Keaton) vuelve a su casa diez años después de que su marido Don (Robert De Niro) la engañara con su mejor amiga (Susan Sarandon), con la que ahora vive. Cuando Alejandro les anuncia que su madre biológica (Patricia Rae) asistirá a la boda y que, debido a sus estrictas creencias religiosas, no debe saber que Ellie y Don están divorciados, éstos tendrán que aparentar que son un matrimonio feliz.
La parte cómica de De Niro sin duda es la menos afortunada de su registro actoral, tal vez la última comedia decente que realizó es Analyze This (Harold Ramis, 1999). Pero una de las peores es esta cinta de hace tres años en la que ni él, ni Diane Keaton, ni Susan Sarandon logran evitar el ridículo total. Aburrida, sin gracia, con un Robin Williams sobre actuado hasta la medula y un elenco de jóvenes sosos y sin química, un verdadero despropósito en el que duele ver a De Niro desperdiciando su talento al recitar diálogos que no arrancan ni una sonrisa.
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4) Godsend (Nick Hamm, 2004)
Paul y Jessie Duncan (Greg Kinnear, Rebecca Romjin-Stamos) han perdido a Adam (Cameron Bright), su hijo de ocho años, en un trágico accidente. Durante los preparativos del sepelio, el doctor Richard Wells (Robert De Niro) les hace una propuesta increíble: clonar a su hijo para devolverlo a la vida. El matrimonio acepta, a pesar de los obvios inconvenientes legales, éticos y morales que esto acarrea.
Este fue el primero de los dos thrillers de medio pelo que filmó a mediados de la década pasada; a pesar de que realiza un papel medianamente corto, no se salva de haberse inmiscuido en esta fallida película que se pierde en el limbo de la mediocridad al recurrur a los típicos efectos de sonido para provocar sustos.
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3) Hide and Seek (John Polson, 2005)
Para ayudar a su pequeña hija de nueve años (Dakota Fanning) a recuperarse del trauma que significó el suicidio de su madre, un psicoanalista neoyorquino (De Niro) deja la ciudad y se va a con la niña a vivir a una casa en el bosque. Lejos de ayudarla, el entorno parece alterar aún más a la pequeña; ella comienza a hablar de un peligroso amigo imaginario llamado Charlie, que amenaza y aterroriza a la fracturada familia.
Estancado ya en su faceta más mercenaria, De Niro filmó dos cintas de suspenso seguidas, ambas bastante deficientes. Con un guión tramposo, que pretende ser sorprendente en su tramo final y sólo logra evidenciar todos su huecos arguméntales, él se encuentra en piloto automático más que nunca; hasta la pequeña Dakota Fanning le gana la partida en todos los planos que comparten.
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2) The Adventures of Rocky and Bullwinkle (Des McAnuff, 2000)
La ardilla Rocky y el alce Bullwinkle, dos dibujos animados, deberán enfrentarse a su peor enemigo: el Jefe Sin Miedo (De Niro) y su secuaces, Boris Badenov (Jason Alexander) y Nastasha Fatale (Renne Russo). Hace ya más de 30 años que su show televisivo fue cancelado y ahora son producto del pasado. Pero todo cambiará cuando el Jefe Sin Miedo y sus secuaces se las arreglan para escapar al mundo real e intentan hipnotizar a toda la población norteamericana mediante un programa de televisión.
Con sólo ver el póster de esta cinta y el look que usa De Niro nos podemos dar cuenta del ridículo que este consagrado actor hizo aquí; no cabe la excusa de que es un producto para niños porque hasta para los más pequeños es aberrante. Probablemente sea la peor película de toda su filmografía.
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1) Freelancers (Jessy Terrero, 2012)
Malo (50 Cent) es el hijo de un detective que fue asesinado, razón por la que ingresa con dos amigos en la academia de policía. Al terminar su entrenamiento, el capitán Joe Sarcone (De Niro), antiguo compañero de su padre, lo toma bajo su protección para que forme parte de un grupo que lucha contra la delincuencia, pero estando ahí adentro encontrará toda una red de corrupción y de mentiras.
Al igual que el multi criticado Nicolas Cage, De Niro también ha tenido que hacer de vez en cuanto una cinta directa a video, sobre todo en los últimos años. Este no es más que otro vehiculo de “lucimiento” para el ex rapero Curtis Jackson “50 Cent” quien además produce el film, en el que también se encuentra dando lastima Forest Whitaker. En teoría es una cinta de acción, pero de eso no hay mucho, es de lo más genérico dentro del género.