*SPÓILERS A CONTINUACIÓN*
Los retornos sorpresivos no terminan, y la guerra parece más inminente que nunca. Así nos dejó el episodio de anoche de la nueva temporada de Game of Thrones, y teniendo en cuenta que los protagonistas parecieran hallarse en su punto más frágil en mucho tiempo, podemos esperar incluso más regresos de algunos personajes olvidados, que funjan como punto de apoyo.
Consideramos que la reaparición de Sandor Clegane, y todo ese pasaje propio de un limbo, no fue para nada en vano. Game of Thrones nos tiene acostumbrados a una amplia profundización en los personajes para la posterior justificación de sus actos, y esta secuencia encaja perfectamente en ello. De ahí que, a partir de la reveladora expresión de The Hound ante la repentina amenaza de La Hermandad sin Estandartes, y con lo aprendido con el sabio Brother Ray (interpretado por Ian McShane), harto de la guerra y los dioses, Clegane se halle efectivamente en un limbo: ¿su odio le llevará a buscar venganza en contra de los seguidores del Red God? ¿O tomará otro camino, en busca quizá de Arya?
La fémina más joven de los Stark es quien necesita más ayuda que nunca, gravemente herida por Waif, y si de regresos hablamos, especulemos: ¿quién en Braavos podría ayudarla? Una primera opción sería Jaqen H’ghar, pero dado que éste prácticamente ha descartado a Arya de los Faceless Men, no parece una opción. Una línea argumental que quedó volando desde la tercera temporada es la de Gendry.
Sí, hasta donde nos quedamos el bastardo de Robert Baratheon se dirigía remando hacia King’s Landing pero, ¿y si por alguna razón, hubiera terminado en Braavos? Según varios mapas, la distancia de Dragonstone (última posición conocida de Gendry) hacia King’s Landing era corta y por ello, poco probable que se perdiera. Sin embargo, siendo el legítimo heredero del Trono de Hierro en su momento, sería imprudente quedarse en la ciudad. Aunque sería precipitado que se lo sacaran de la manga tan repentinamente, no sería demasiado extraño que fuera él quien le salvara el trasero a Arya, sobre todo tomando en cuenta su relación previa. Otro posible candidato es, como ya mencionamos, The Hound, aunque presumiblemente están muy lejos uno del otro, y Arya pareciera no tener demasiado tiempo.
Mientras tanto, en el Norte las alianzas continúan, sin muy buenos frutos. Aunque un par de éxitos fueron concretados (incluyendo la magnífica escena con Lady Lyanna de la Casa Mormont, un gran personaje que esperamos no sea temporal ni desperdiciado), pareciera que Jon Snow necesita uno de esos milagrosos regresos para que su batalla con Ramsay Bolton no sea en vano. Aunque Sansa es quien tiene un as bajo la manga (cortesía de Littlefinger, refiriéndonos a los Knights of the Vale), el panorama pinta turbio para Snow. Quizá Bran pueda irrumpir de algún modo, o bien, Jaime Lannister se gane temporal simpatía de los Stark arremetiendo contra la Casa Frey. Todo es posible.
Por último, ¿qué podemos esperar en King’s Landing? La siempre astuta Margaery Tyrell pareciera idear una particular venganza en contra de La Fe de los Siete, pero ¿con ayuda de quién? Tommen tiene demasiada simpatía con el High Sparrow para que le tomen en cuenta, aunque quizá una alianza con los Lannister no sería descartable. Si a esto añadimos que Daenerys busca dirigirse a King’s Landing junto a Drogon y un enorme ejército de Dothraki, y que resulta que Asha Greyjoy cuenta con los barcos necesarios para transportarles y va en busca de La Madre de los Dragones, ya tenemos un frente bien definido. Pareciera que todas las piezas ya están dispuestas para al fin tener la gran batalla de la temporada.