En nuestra reseña de media temporada de The Night Of (Richard Price y Steven Zaillian, 2016) ya hablábamos de la gran calidad narrativa y visual de la más reciente miniserie de HBO y, ahora que ha finalizado, podemos confirmar que este material va al estante de lo mejor del 2016, aunque desafortunadamente también al de lo más ignorado del año.
Recordemos el argumento simple de la serie: luego de tomar prestado el taxi de su padre para ir a escondidas a una fiesta, Nasir Khan (Riz Ahmed) conoce a Andrea (Sofia Black-D’Elia), una chica a quien, después de una vertiginosa sesión de sexo y drogas, halla apuñalada sin recordar qué ocurrió. A partir de aquí se inicia un largo proceso en el que Nasir deberá luchar por demostrar su inocencia.
Los elementos que convergen y entorpecen el proceso judicial de Nasir, como el racismo y la lentitud burocrática, cobran más relevancia hacia el final de la serie, y la resolución que se le da a la historia, que había alcanzado enormes expectativas, es sencillamente impecable, no por su contundencia sino por su ambigüedad. Es admirable que, a la vez, la serie se las arregle para dejar en el espectador una pizca de esperanza en medio de una desalentadora conclusión.
El ímpetu de la miniserie en conjunto no se podría haber alcanzado sin las magníficas actuaciones de John Turturro como el confidente abogado Jack Stone (con una enfermedad cutánea que, a mi parecer, simula ese malestar que la corrupción y la burocracia provocan a la justicia), y la complejidad moral de algunos de sus protagonistas.
La conclusión, además, hace que el espectador pueda sentirse más partícipe de la serie; realmente es a juicio de éste definir quién es el verdadero culpable del asesinato de Andrea y, por donde se le vea, el entramado argumental hace de cualquier resultado una delicia. Todo esto con un nivel de producción que persiste de inicio a fin, y en el que la dirección guía oportunamente al espectador hacia lo que quiere contar y criticar, sin titubeos ni huecos.
“Justicia que llega tarde no es justicia”, dice una pesimista pero acertada frase que podría resumir el golpe que constituye The Night Of, una serie que se siente sólida y tensa en todo su transcurso, y de la que (por puro morbo, ya que el trabajo de Tuturro es fantástico) sólo resta preguntarse: ¿cómo habría sido el resultado con James Gandolfini o Robert De Niro? Quizá en la edición de bluray nos lo dejen saber con el mítico episodio piloto que involucró al primero y que nunca fue transmitido. Mientras tanto, estos son ocho capítulos más que recomendados para un fin de semana.