A los 80 años murió la actriz Mary Tyler Moore, quien saltó a la fama gracias al show de Dick Van Dyke (Mary Poppins) en la década de los 60s, para después convertirse en una de las primeras actrices en obtener un rol protagónico en su propio programa televisivo, el Mary Tyler Moore Show, sobre la vida y dificultades de una joven soltera en un mundo empresarial liderado por los hombres. Gracias a esto, Tyler Moore fue considerada desde muy temprana edad como una de las precursoras en cuanto a roles femeninos con carácter, además de una importante promotora de la emancipación femenina de los 60s y 70s.
Encabezando su propio show, la actriz y comediante obtuvo tres premios Emmy consecutivos (de un total de siete), que se sumaron a sus dos Globos de Oro obtenidos gracias a éste y el show de Dick Van Dyke por igual. En su haber también sobresale una nominación al Globo de Oro como mejor actriz drmática y otra a un premio Oscar como mejor actriz, ambas por su inesperado y magnífico rol en Ordinary People (1980), dirigida por el también actor Robert Redford.
Considerada como una de las mujeres más influyentes tanto del cine como la televisión, Tyler Moore se desempeñó por décadas como una importante activista en pro de los derechos de la mujer, así como principal donadora a la causa detrás de la búsqueda por la cura de la diabetes.
Su trabajo en la pantalla grande también contiene importantes participaciones, de entre las que sobresale su rol en la ya mencionada Ordinary People, así como en la comedia de enredos Flirting with disaster (1996) de David O. Russell y más recientemente en Labor Pains (2000), al lado de Lindsay Lohan.
