Entrevistamos a Israel Cárdenas, co-director de Dólares de Arena, película que cuenta la relación que hay entre una joven dominicana y una señora europea de mayor edad, y cómo ambas buscan escapar de su soledad.
Cinema Móvil: ¿Para ti, qué es Dólares de Arena?
Israel Cárdenas: Es la cuarta película que dirijo con Laura (Amelia Guzmán) y que co-producimos juntos.
Es una cinta que filmamos en República Dominicana, en un lugar que se llama Samana, Las Terrenas; un lugar que tiene muchas historias y un contexto muy particular. Pasó de ser un pueblo pequeñito de pescadores a ser un lugar turístico, tanto de visitantes nacionales como extranjeros, pero no es el clásico turismo all-inclusive, más bien se dio de manera más simple y orgánica. Entonces se albergan muchas historias en este tipo de ambiente y Dólares de Arena retrata una de tantas.
Este lugar parece ser improbable para la vida moderna, rodeado de naturaleza tropical, sin el estrés de las ciudades y anclado al pasado. ¿Por qué hacer una historia aquí?
A nosotros siempre nos ha llamado la atención filmar fuera de la ciudad, desde Cochochi (2007). No sé a qué responda exactamente, pero nos interesa lo de afuera. Quizá es una manera de extrapolar, de manera sutil o inconsciente, lo que sucede en la ciudad.
Este lugar (Samana) tiene un imán que nos llamó a filmar otra vez ahí. Dominicana es así en general, tiene su grandes ciudades (Santo Domingo) pero el campo, el resto de los pueblos, son así. La vida tiene su encanto, una forma de vida que no se encuentra en la ciudad.
¿Qué tan difícil fue filmar ahí?
Tan difícil y riesgoso como cualquier otra producción. Pero el lugar aportó mucho a los personajes, a la manera en que se fue desarrollando la historia y la producción de la cinta. Nos inspiró a todos.
La película parece tener un mensaje político que habla sobre el tercer y el primer mundo, sobre la conexión entre América y Europa, la conquista y la explotación. ¿Este mensaje buscaban retratarlo o fue algo que ya es intrínseco de la zona?
Hoy en día, todo filme tiene un mensaje social y político. Nosotros no nos ponemos a pensar mucho en eso, pero igual sabemos que ahí está. Lo que nos llamó la atención en primer lugar fue las relaciones humanas que se estaban dando en esta zona. Entre extranjeros, de otro mundo totalmente, de otra posición, no digo privilegiada, pero sí es otra posición socio-cultural y socio-económica en este lugar donde hay cierta características, virtudes y desventajas. Ellos conviven con la gente del lugar y no sólo con la parte “yo te empleo a ti” sino que realmente hay un trato de iguales.
Nos dimos cuenta que estábamos hablando de otro aspecto de la migración. Obviamente está el deseo de la migración de sur a norte, del Caribe a Europa, pero también está la migración de norte a sur. De estos personajes que, aparentemente, tienen todo, pero están solos y quieren buscar el paraíso, el bienestar. A final de cuentas los dos personajes están buscando el bienestar.
De todos los temas, ¿Cuál es el principal de Dólares de Arena?
El tema principal es la soledad. Personajes que buscan sanar esa soledad, así como la duda que lleva el emigrar, el cambio. El saber si lo que se está buscando realmente está en otro lugar.
¿Cómo fue trabajar con Geraldine Chaplin?
Un encanto, súper buena onda. Aprendimos mucho de ella, es muy generosa, no sólo delante de cámaras, sino también detrás. Una persona que está entregada a la película. Se volvió cómplice del proyecto y eso es invaluable.